domingo, 16 de marzo de 2014

Papas rojas gratinadas

Hoy os traigo una receta de patatas original, que encontré en una revista de cocina (Comer Bien) y que he tuneado a mi gusto. Se trata de unas simples patatas rojas (piel fina), cocidas, aplastadas y horneadas después. En la revista venían tal cual, con un poco de sal gorda, con el fin de servir de acompañamiento a carnes.

Nosotros, aprovechando que teníamos en casa unos quesos que nos sobraron de la pizza, las cocinamos de cena como plato único, añadiéndole también unos taquitos de chorizo. La receta más sencilla no puede ser y admite que le pongáis encima los ingredientes que a vosotros más os gusten.


Ingredientes:
  • Patatas rojas de tamaño mediano
  • Sal
  • Quesos variados
  • Taquitos de chorizo
 Preparación:
  1. Se cuecen las patatas durante 30 minutos en abundante agua salada. Se dejan enfriar.
  2. Se aplastan con ayuda de una espátula.
  3. Se ponen por encima los taquitos de chorizo y trozos de quesos variados.
  4. Se meten al horno precalentado a 200 ºC durante 10-15 minutos hasta que estén bien gratinadas.

viernes, 14 de marzo de 2014

Pan con Nutella, aceite de oliva y sal

Hace unos meses, por razones que seguramente no vienen el caso, mis amigos del pueblo nos regalaron un bote de 5 kg de Nutella, que por cierto nos encanta. Al ser tanta cantidad hemos tenido que buscar nuevas recetas para consumirla y seguramente pronto aparecerá en el blog alguna receta. Mientras tanto, os contamos una receta de lo más simple pero de alta cocina, pues la conocí gracias al libro "La comida de la familia" de Ferran Adrià, donde cuenta recetas que comía a diario el equipo de El Bulli, por lo que eran deliciosas pero también sencillas y baratas.


Ingredientes:
  • Rebanadas de pan
  • Nutella
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal gorda

Preparación:
  • Untar el pan con la nutella, añadir unos granos de sal y regar con un chorro de aceite de oliva virgen extra.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Fideos soba con berenjena y mango

Esta receta que traemos hoy la hemos sacado de un libro que nos regalaron unos amigos en diciembre, "El gourmet vegetariano" de Yotam Ottolenghi. En el hay un montón de recetas interesantes que tenemos que ir haciendo poco a poco. Mientras tanto, elegimos estos fideos soba con berenjena y mango, que tienen ese toque oriental que tanto nos gusta y que tiene la particularidad de ser una receta fría.

Tras investigar un poco me entere de que "soba" es la palabra que los japoneses utilizan para designar al trigo sarraceno o alforfón, que es la variedad que se utiliza para realizar estos fideos y que tiene la característica de que no posee gluten. Sin embargo, las personas celiacas tienen que tener cuidado, porque en ocasiones, para que la textura sea mejor mezclan la harina de este trigo con harina normal, que sí tiene gluten. Por curiosidad miramos el paquete que compramos nosotros y efectivamente tiene harina de trigo además de alforfón.

Otra curiosidad es la diferencia que existe entre los precios de este tipo de productos en los supermercados occidentales y en los orientales, donde cuestan LA MITAD!! Nosotros los compramos en una tienda china que hay en Zaragoza y el paquete de 300 g nos costo 1.45 euros.

Más curiosidades, ¿sabíais que en Japón utilizan estos fideos como comida de fin de año? Es así ya que consideran que esto les proporcionara una larga y próspera vida (ya se sabe, en cada país hay una tradición)

Investigando más, he visto que la forma tradicional de servir esta comida (que también es muy popular en Japón por ser rápida de preparar y nutritiva) es con una salsa a base de mirin, caldo dashi y salsa de soja. En otra ocasión los probaremos así.

Os dejamos la receta a ver si os gustan tanto como me han gustado a mí. La receta que os damos no es exactamente la que viene en el libro, sino como la hice yo, ya que esta un poco tuneada por falta de algún ingrediente.



Ingredientes (2 personas):

  • 150 g de fideos soba
  • 1/2 mango
  • 1 berenjena
  • 40 ml de salsa mirin
  • 1/2 cucharadita de azúcar
  • 1 cucharada de aceite de sésamo
  • 1 diente de ajo 
  • 1 guindilla
  • Zumo de medio limón
  • Aceite de oliva
  • Cilantro fresco
Preparación:
  1. Lo primero que vamos a hacer es preparar la salsa, que tendremos que dejar enfriar. Para ello calentamos el mirin en una cazuela, agregamos el azúcar y removemos hasta que se disuelva. Retiramos del fuego y añadimos el aceite de sésamo, el diente de ajo partido por la mitad y la guindilla. Lo dejamos reposar hasta que este preparado el resto del plato.
  2. Por otra parte en una sartén con un poco de aceite de oliva sofreímos la berenjena en dados hasta que este tierna. La retiramos del fuego y la ponemos encima de papel de cocina para evitar el exceso de grasa.
  3. En una cazuela con agua hirviendo, cocemos los fideos durante 6-7 minutos. Cuando estén los escurrimos y los lavamos bien con agua fría.
  4. Partimos el mango en trozos no muy grandes y picamos el cilantro fresco.
  5. Retiramos la guindilla y el ajo de la salsa y la vertemos sobre los fideos. Añadimos también un chorrito de zumo de limón. Removemos bien.
  6. Agregamos la berenjena, el mango y el cilantro removiendo bien para que todos los sabores se impregnen y servimos.

lunes, 10 de marzo de 2014

Pizza cinque formaggi

Como ya os contamos el otro día en la entrada de la pizza margherita, hemos aprendido a hacer la masa casera de la pizza, así que, como es un plato que nos gusta mucho, aprovechamos los fines de semana para hacerla.

Esta vez la elegida ha sido una pizza "quatro formaggi", aunque en nuestro caso tiene 5. Y la traemos aquí al blog porque tiene una peculiaridad, y es que como los ingredientes pesan más que el simple tomate y mozzarella de la margherita, necesita que la masa sea un poco más gruesa.

Por eso esta vez usamos el doble de masa para una fuente de horno rectangular de 38x34cm. Como podéis ver en la imagen, los bordes también estan un poco mas gruesos, para que el queso no desborde al fundirse en el horno.


En este caso, la pizza es para 3 o incluso 4 personas, depende del apetito.

Ingredientes (3-4 personas):

Para la masa:
  • 300 g de harina
  • 200 ml de agua
  • 1 sobre de levadura química
  • 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
  • 1/2  cucharadita de sal

Para el "relleno":
  • 200 g de tomate triturado
  • 125 g de mozzarella de búfala
  • Queso gorgonzola al gusto
  • Queso emmental al gusto
  • Queso parmigiano al gusto 
  • Queso de rulo de cabra al gusto
 Preparación:
  1. Lo primero es hacer la masa. Para ello hacemos un volcán de harina en la encimera o en un bol, agregamos la levadura, la sal y el aceite y vamos añadiendo el agua y mezclándolo con ayuda de un tenedor o cuchara.
  2. Cuando este más o menos integrado lo pasamos a una superficie plana y trabajamos la masa con las manos durante unos 10 minutos hasta que consigamos una bola lisa, homogénea y que no se pegue a las manos (a lo mejor necesitamos un poco más de harina, pero con cuidado para no pasarse).
  3. Envolvemos la bola de masa en papel transparente y dejamos reposar durante una hora.
  4. Finalizado el reposo, para evitar que se pegue la pizza untamos con un poco de aceite la fuente o bandeja donde vayamos a hornearla y espolvoreamos un poco de harina.
  5. Estiramos la bola de masa dejando los bordes un poco más gruesos.
  6. Encima de la masa ponemos el tomate triturado, sal (sin pasarnos), la mozzarella en trozos no muy grandes y el resto de los quesos en cantidad variable al gusto
  7. Horneamos durante 15 minutos a 200 ºC (con el horno ya precalentado).
  8. Cuando salga del horno le añadimos un chorrito de aceite de oliva si queremos (esto es opcional)
Esta masa con estas cantidades ya os servirá para cualquier combinación de ingredientes que queráis hacer, jamón york y atún, cuatro estaciones, bolognesa...

¡¡Espero que os guste y que la utilicéis muchas veces!!

jueves, 6 de marzo de 2014

Pizza margherita e crudo

Hace tiempo Superfluo me regaló un libro para hacer pizzas caseras. En ese momento intentamos hacerla un día, pero el resultado no fue el esperado por dos motivos principalmente: el primero que la masa era bastante gorda y el segundo que usamos levadura fresca de la que venden en la zona de refrigerados de los supermercados y para mi gusto le da un sabor nada agradable como a cerveza (es levadura de cerveza). Así que cuando queríamos pizza seguíamos pidiéndola a domicilio en las pocas pizzerías decentes que hay en Zaragoza.

Pero hace unas semanas una amiga, Elena, hizo pizza en su casa y nos puso una foto por Whatsapp y me metió de nuevo el gusanillo. Después de ver un montón de vídeos en YouTube (bendito YouTube donde puedes encontrar de todo) di con una receta que se hacía con levadura química, la de los sobrecillos, y esa fue la que hice.

El primer día el resultado de sabor fue bueno (ya no me sabía la masa a cerveza) pero el grosor a superfluo no le gustó, así que probamos a hacer la mitad de la cantidad de masa y estirarla lo mismo. No voy a decir que sea fácil porque hay que tener cuidado de que la masa no se rompa, pero el resultado a mi al menos me gustó, y dado que en Zaragoza tampoco es que nos sobren pizzerías verdaderamente italianas, es una alternativa buena y mucho más barata cuando nos apetece comer este gran manjar.

Hay que tener en cuenta, sin embargo, que está masa tan fina puede romperse si añadimos ingredientes que pesen mucho (por ejemplo, en una pizza cuatro quesos). En ese caso habría que hacer más cantidad de masa o estirarla menos. Sin más, os dejo la receta que nosotros utilizamos para que podáis usarla en casa.


Ingredientes (para una fuente ovalada de 37x32cm):

Para la masa:
  • 150 g de harina
  • 100 ml de agua
  • 1/2 sobre de levadura química
  • 1 cucharadita de aceite de oliva virgen extra
  • 1/4 de cucharadita de sal
Para el "relleno":
  • 200 g de tomate triturado
  • 125 g de mozzarella de búfala
  • 4-5 hojas de albahaca
  • 100 g de jamon serrano 
 Preparación:
  1. Lo primero es hacer la masa. Para ello hacemos un volcán de harina en la encimera o en un bol, agregamos la levadura, la sal y el aceite y vamos añadiendo el agua y mezclándolo con ayuda de un tenedor o cuchara.
  2. Cuando este más o menos integrado lo pasamos a una superficie plana y trabajamos la masa con las manos durante unos 10 minutos hasta que consigamos una bola lisa, homogénea y que no se pegue a las manos (a lo mejor necesitamos un poco más de harina, pero con cuidado para no pasarse).
  3. Envolvemos la bola de masa en papel transparente y dejamos reposar durante una hora.
  4. Finalizado el reposo, para evitar que se pegue la pizza untamos con un poco de aceite la fuente o bandeja donde vayamos a hornearla y espolvoreamos un poco de harina.
  5. Estiramos la bola de masa dejando los bordes un poco más gruesos.
  6. Encima de la masa ponemos el tomate triturado, sal (sin pasarnos), la mozzarella en trozos no muy grandes y las hojas de albahaca.
  7. Horneamos durante 15 minutos a 200 ºC (con el horno ya precalentado).
  8. Cuando salga del horno le añadimos un chorrito de aceite de oliva y el jamón serrano por encima.
Y a saborearla con la bebida que más os apetezca (los italianos la toman con cerveza). Lógicamente, una vez hecha la masa se pueden agregar los ingredientes que más nos apetezcan. Eso es lo bueno de las pizzas, ¡¡que se pueden tunear hasta el infinito!! ¡¡Espero que os guste!! 

domingo, 2 de marzo de 2014

Raclette

Hace ya un tiempo nuestros amigos Rafa y Lyda nos regalaron para nuestra nueva casa una parrilla para hacer raclettes. Queríamos estrenarla con ellos quedando un día a comer y por fin lo hicimos hace unos fines de semana. La raclette es un plato suizo que se llama igual que su principal ingrediente: una variedad de queso que funde bastante bien. Pensábamos que sería complicado encontrar el queso, pero lo tenían en Carrefour. Se trata de ubicar la parrilla en el centro de la mesa, ir cocinando en su parte superior los ingredientes que queramos, acompañarlos de patata asada, cubrirlos con queso y dejar que se funda en la parte inferior del aparato.


Es por tanto un plato adecuado para comidas informales y muy versátil al poder añadir los ingredientes que nos apetezcan o que tengamos a mano. Para esta primera ocasión usamos una receta de Directo al paladar a base de salchichas, chorizo criollo y champiñones. El resultado fue muy bueno y seguiremos probando nuevas recetas.


Ingredientes (4 personas):
  • 400 g de queso raclette
  • 4 patatas grandes
  • 8 salchichas frescas
  • 8 chorizos criollos
  • 150 g de champiñones
  • Sal
  • Opcionalmente, salsas para acompañar (mahonesa o la que nos guste)

Preparación:
  • Con antelación, pelar las patatas, secarlas, hacerles un corte en forma de cruz y asarlas al horno durante 1h a 180º C.
  • Cortar el rabo a los champiñones, lavarlos, secarlos y trocearlos.
  • Trocear las salchichas y los chorizos.
  • Partir el queso en trozos finos aproximadamente de la forma de las bandejas individuales.
  • Encender la raclette, y cocinar en la parte superior las salchichas, los chorizos y los champiñones.
  • Una vez cocinados, colocar un poco de patata en una bandeja individual, salar, añadir un poco de los ingredientes cocinados en el paso anterior, cubrir con queso y cocinar en la parte inferior.
  • Repetir hasta saciar nuestro apetito.