miércoles, 2 de diciembre de 2015

Cookie supercuqui de eufórica María

Durante mi última estancia en Granada tuve la suerte de coincidir con el V Concurso de Pintxos Realejo y poder participar en esta edición. Mi aportación fue esta "Cookie supercuqui de eufórica María" que obtuvo un modesto resultado pero que os recomiendo porque estoy realmente orgulloso de ella. Este año parece que solamente hablamos de galletas, pero en esta ocasión es algo bien diferente: se trata de una variante de la tostada de tomate con ricotta inventada por Azalea pero con una base formada por una galleta María. Además, he añadido nuez (para dar un toque crujiente), albahaca fresca (para perfumar y dar un toque fresco) y sal de vino (para contrarrestar el sabor dulce de la galleta y dar un toque de color violeta).

La receta no tiene mucho misterio pero puedo añadir algunos consejos, como utilizar tomates cherry cortados en láminas finas (los Kumato parecen ser especialmente buenos para ello), utilizar aceite de oliva previamente arotimatizado con albahaca (para potenciar el sabor y multiplicar el olor) y combinar sal fina (común) con sal gorda; de hecho la única dificultad es hallar el equilibro entre el dulce de la galleta y la sal.

Lo de eufórica María trataba de crear algunas falsas expectativas aprovechando que nadie esperaría a priori que hiciera referencia a la acepción galletil de la palabra, y me consta que la verde albahaca creó dudas razonables en alguno de los asistentes, pero tranquilos: es un plato apto para todos los públicos.

El uso de galletas María en tapas saladas lo vi por primera vez en la casa de comidas zaragozana La Republicana, donde sirvieron hamburguesas entre galletas, en vez de entre bollitos. En el bar zaragozano La Bodeguilla de Santa Cruz, de los mismos dueños, también he visto ensaladilla rusa servida sobre galletas.



Ingredientes:
  • Galletas María
  • Queso ricotta
  • Tomates cherry Kumato 
  • Nuez
  • Albahaca fresca
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal gorda coloreada (Sal de vino de Abadía Retuerta)
  • Sal fina común

Preparación:
  • 2-3 días antes, lavar y secar bien 2-3 hojas de albahaca e introducirlas en un recipiente con aceite de oliva virgen extra. Pasado ese tiempo, retirar las hojas porque podrían llegan a pudrirse si las dejamos demasiado tiempo.
  • Lavar y secar los tomates cherry y partirlos en rebanadas finitas. Se necesitan unas 3 rebanadas por pintxo, así que con cada tomate tenemos aproximadamente para 2 pintxos.
  • Untar queso ricotta encima de cada galleta y colocar encima los tomates.
  • Lavar y secar las hojas de albahaca. Picarlas finamente y añadirlas sobre la galleta. Cada hoja da para 4 galletas aproximadamente.
  • Trocear la nuez y añadirla también a lo anterior.
  • Espolvorear con sal fina, regar con un chorrito de aceita de oliva (procurando que se distribuya homogéneamente) y concluir con un poco de sal de vino.
Espero que disfrutéis este aperitivo, ¡a mí me encanta!

martes, 24 de noviembre de 2015

Galletas Star Wars

Ya hace años que colaboramos con Retromañía haciendo galletas temáticas de informática o videojuegos clásicos. En el blog ya hemos hablado de las galletas Pacman, con su versión mejorada, y de las galletas Tetris. Este año hemos celebrado el cuadragésimo aniversario de la saga Star Wars con galletas dedicadas a algunos de los protagonistas de La guerra de las galaxias.


La receta no tiene ningún misterio. Basta seguir las indicaciones de las galletas Tetris, utilizando unos colorantes y cortadores de galletas apropiados. Nosotros utilizamos estos cortadores, que además salieron muy baratos en Ebay.

 
Los colorantes usados y sus marcas fueron negro de Wilton (Darth Vader), marrón de Wilton (Chewbacca), verde de Sugarflair (Yoda), y amarillo yema de Sugarflair (R2-D2). Con los ingredientes de las galletas Tetris nos salieron 227 galletas: 96 negras de Darth Vader, 66 verdes de Yoda, 35 marrones de Chewbacca y 30 amarillos de R2-D2.


Como curiosidad, las galletas llamaron la curiosidad del programa Aragón en abierto de Aragón TV (ver enlace, a partir del minuto 1:07:30). ¡Probadlas y nos contáis!

domingo, 8 de noviembre de 2015

Galletas del músico de té verde

Hace 15 días fue mi cumpleaños y decidí llevar un pequeño dulce al trabajo para tomar con todos los compañeros. Para ello hice los bombones músico que presentamos en esta entrada, pero utilizando chocolate negro, chocolate blanco y chocolate blanco con té matcha.


  • Las de negras y las blancas no tienen más misterio que seguir la receta original deshaciendo los chocolates y poniendo cucharaditas con unos frutos secos por encima. 
  • Las verdes las hice deshaciendo una tableta de chocolate blanco y agregando una cucharada de té matcha. Removemos bien y ponemos cucharaditas sobre un trozo de papel de horno. Decoramos con arándanos rojos y piñones que le dan un buen contraste de color. Los metemos toda la noche en el frigorífico para que endurezcan.
Fácil ¿no?  Y son todo un éxito. Ahora que llega la época navideña pueden ser un buen regalo. Ya nos contaréis si las probáis.

domingo, 25 de octubre de 2015

Orecchiette con brécol y salchicha

Ya os conté hace un tiempo que Durante mi último viaje a Italia compré orecchiette para Azalea, que es muy aficionada a este tipo de pasta típica de Apulia. En esta ocasión los hemos comido con salchicha y brécol, una deliciosa receta incluso para gente como yo que no es nada aficionada a los arbolitos verdes: prácticamente no los como de otra manera.


Ingredientes (2 personas):
  • 160 g de pasta corta, preferiblemente orecchiette
  • 4 salchichas de carnicería
  • 150 g de brécol (nosotros lo usamos congelado)
  • Tomillo
  • Vino blanco
  • Queso parmigiano para rallar
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Preparación:
  • El primer paso es poner el agua para cocer la pasta a hervir, para lo que llenamos una cacerola grande de agua y la ponemos al fuego tapada para que llegue antes a ebulición.
  • Mientras tanto, cocemos el brécol. Nosotros lo hacemos al vapor, utilizando el estuche de vapor Lékué. Basta con introducir el brécol, una vez descongelado, con un poco de agua, cerrar el estuche y calentarlo durante 4-5 minutos en el microondas.
  • Ahora troceamos las salchichas (hay quien quiere prefiere quitarles la tripa y sacar el contenido pero nosotros no solemos hacerlo), las espolvoreamos con tomillo (u otras hierbas aromáticas de nuestro agrado) y las salteamos unos minutos en una sartén con un poco de aceite de oliva.
  • Al tener doradas las salchichas, añadir el vino y dejarlo evaporar.
  • A continuación añadir el brécol, remover bien y cocinar durante unos minutos más para que se mezclen bien los sabores.
  • Una vez que el agua llega a ebullición, añadir una pizca de sal y cocer la pasta durante el tiempo que indiquen las instrucciones del paquete.
  • Cuando se haya cocido la pasta, escurrirla bien y añadirla a la sartén. Remover bien durante unos segundos y servir en los platos..
  • Acompañar en la mesa de una cuña de queso parmesano para que cada comensal lo ralle a su gusto.

miércoles, 30 de septiembre de 2015

Ajo blanco de melón con brochetas de ahumados y uvas

¡¡Hola a todos!! Antes de que termine oficialmente la época de calor vamos a compartir con vosotros esta receta de ajoblanco con melón que encontramos en Gastronomía & Cía y que está buenísimo!!

Como sabéis, el ajoblanco es una sopa fría con base de almendras que se toma mucho en Andalucia. Con esos calores que hace allí, son los reyes de la sopa fría :) Normalmente se acompaña de uvas, pero si queréis que sea un plato único puede acompañarse de unos ahumados por ejemplo y un buen trozo de pan.

Sin más, os dejo con la receta:


Ingredientes (4 personas):
  • 100 g de almendra cruda
  • 50 g de pan del día anterior
  • 2 rodajas de melón
  • 1 ó 2 dientes de ajo
  • Agua
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Vinagre
  • Sa
  • Uvas
  • Ahumados
Preparación:
  1. En un vaso de batidora ponemos la almendra cruda, los dientes de ajo y el melón. Añadimos un poco de agua y batimos bien. 
  2. Después agregamos el pan y batimos, añadimos mas agua hasta que tenga la consistencia que nos guste, batiendo bien para que la almendra quede bien fina, porque sino nos encontraremos trocitos.
  3. Aliñamos con aceite, sal y vinagre al gusto y volvemos a batir. Probamos y rectificamos el aliño si es necesario.
  4. Montamos las brochetas de acompañamiento, intercalando en un palo de brocheta trozos de ahumados con uvas.
  5. Servimos y decoramos con un chorro de aceite de oliva.

lunes, 31 de agosto de 2015

Ensalada tropical

Aún quedan algunos días calurosos antes de que termine el verano y apetecen más que nunca las ensaladas. Normalmente, preferimos ensaladas más sanas aliñadas con aceite y vinagre, pero de vez en cuando no viene mal darse un caprichito en forma de salsa más calórica. De vez en cuando, preparamos una ensalada tropical aprovechando que tengamos en casa langostinos cocidos, que nos regalan con cierta frecuencia en el hipermercado, o salsa rosa abierta para alguna otra receta. Podemos utilizar las frutas que queramos y añadir unos frutos secos, que dan un buen toque. Os dejamos la receta aunque normalmente (como se ve en la foto) prescindimos del maíz y del cangrejo.



Ingredientes (2 personas):
  • 150 g de lechugas variadas
  • 6 langostinos cocidos
  • 1 aguacate
  • 1/2 mango
  • 2-4 rodajas de piña
  • Opcionalmente, 2-4 cucharadas de maíz
  • Opcionalmente, 2-4 palitos de cangrejo
  • Frutos secos variados
  • 2-4 cucharadas de salsa rosa

Preparación:
  • Lavar las lechugas y escurrirlas bien. Colocarlas en el fondo de los platos.
  • Pelar el mango, el aguacate y los aguacates, trocearlos junto a la piña y el cangrejo y añadirlos a la ensalada.
  • Añadir a la ensalada el maíz y los frutos secos.
  • Añadir la/s cucharada/s de salsa y servir.

viernes, 31 de julio de 2015

Orecchiette al pesto di rucola e noci

La semana pasada estuve de viaje en Roma y Azalea me pidió que trajera como souvenir orecchiette, un tipo de pasta típico de la región italiana de Apulia pero muy común también en la capital del país. Como su nombre indica, es una pasta con forma de orejitas que se toma principalmente con grelos (cime di rapa). Como no estamos en temporada de grelos, los cocinamos con un pesto a base de rúcula y nueces, que es otro acompañamiento habitual. Evidentemente esta salsa también puede utilizarse con otros tipos de pasta y os lo recomiendo porque es bastante original y muy diferente a otros miembros de la familia de los pestos.


Ingredientes (2 personas):
  • 160 g de orecchiette u otro tipo de pasta
  • 2 puñados de hojas de rúcula
  • 1 puñado de nueces peladas
  • 1/2 diente de ajo
  • Queso parmesano
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal

Preparación:
  • Cocer la pasta al dente en abundante agua salada el tiempo que indique las instrucciones del paquete.
  • Mientras tanto, prepararemos la salsa. Comenzamos lavando y secando bien la rúcula, utilizando una centrifugadora, y la añadimos al recipiente de la batidora.
  • Añadimos medio diente de ajo (o la cantidad al gusto), las nueces ligeramente partidas, un poco de queso parmesano troceado, una pizca de sal y un chorro generoso de aceite de oliva virgen.
  • Batimos hasta homogeneizar el pesto. Podemos rectificar añadiendo más aceite o un poco de agua de cocción de la pasta para reducir la consistencia de la salsa. Conviene mencionar que en esta receta se usan muchas más hojas de rúcula que hojas de albahaca en el pesto clásico genovés, por lo que la consistencia será más líquida.
  • Escurrir la pasta, mezclarla bien con el pesto y servir junto a queso parmesano para que cada comensal lo ralle por encima a su gusto.

domingo, 28 de junio de 2015

Porra de naranja

La porra antequera es una variante del clásico gazpacho andaluz. No está muy claro cuál es realmente la diferencia pero principalmente parece ser la consistencia: la porra es más densa que el gazpacho, que incluso se puede beber. La variante que hoy presentamos consiste en sustituir los tomates por naranjas (solamente su zumo), lo que es bastante interesante en estos días calurosos en que conviene tener un amplio repertorio de platos refrescantes. Como todos los miembros de la familia de los gazpachos, admite múltiples guarniciones, pero en este caso nos hemos decantado con huevo duro y bacalao, que combinan muy bien la naranja.
 



Ingredientes (2 personas):
  • Zumo de 5 naranjas de zumo (aproximadamente 300 ml)
  • 1 huevo duro
  • Bacalao ahumado para decorar
  • 1/2 barra de pan duro
  • 1/2 diente de ajo
  • Sal
  • Aceite de oliva virgen extra
Preparación:
  • Exprimir el zumo de las naranjas y añadirlo al vaso de la batidora.
  • Empapar ligeramente el pan en agua para ablandarlo un poco y añadirlo al vaso.
  • Añadir medio diete de ajo pelado sin el germen, sal (para contrarrestar el dulzor de la fruta) y un generoso chorro de aceite. 
    • A diferencia de otros gazpachos, no se añade vinagre porque la naranja ya aporta suficiente acidez.
  • Batimos muy bien y dejamos enfriar antes de servir. Se puede añadir agua fría al gusto para reducir la consistencia.
  • En el momento de servir, decorar con tacos de huevo duro y de bacalao ahumado o desalado.

miércoles, 20 de mayo de 2015

Trilogía de trufas 2.0

Hace un tiempo ya os presentamos una trilogía de trufas donde las recubrimos de té matcha, fideos de chocolate y cacao en polvo. Hemos decidido innovar un poco y probar trufas con diferentes cubiertas, más coloridas que las de chocolate, y os las presentamos recubiertas de coco, almendra y pistacho.

Un par de comentarios previos. El coco rallado y el crocanti de almendra se pueden encontrar en las zonas de decoración de dulces de las grandes superficies. Puede utilizarse también crocanti de pistachos, pero nosotros no lo encontramos y nos pareció que el toque salado de los pistachos normales no quedaba mal. Las cantidades dependen bastante del tamaño de las trufas: en la primera trilogía nos salieron unas 24, pero en esta ocasión fueron algo más de 30.


Ingredientes (30 trufas):

  • 280 g de chocolate negro (por ejemplo, Dolca de Nestlé)
  • 40 g de mantequilla
  • 60 g de azúcar glaseado
  • 60 ml de nata líquida
  • 1 puñado de coco rallado
  • 1 puñado de crocanti de almendra
  • 1 puñado de pistachos
Preparación:

  • Reservar unos 30 gramos de chocolate y preparar las trufas siguiendo los cinco primeros pasos que explicamos aquí.
  • Pelar los pistachos, escaldarlos en agua hirviendo durante un minuto, retirarles la piel y triturarlos en trozos pequeños.
  • Colocar en tres boles pequeños los pistachos, el coco y la almendra.
  • Fundir el chocolate reservado en el microondas, a temperatura muy baja para que no se nos queme.
  • Recubrir cada bolita con un poco del chocolate fundido mientras aún esté caliente, para que se adhieran bien las cubiertas.
  • Colocar la bolita en en uno de los boles y moverlo hasta que la trufa quede recubierta con el relleno.
  • Repetir la operación con todas las trufas, formando un tercio con cada bol, y dejar enfriar.

lunes, 27 de abril de 2015

Cóctel de gambas

Ya hace un tiempo (desde entonces, tenemos la receta en borradores pendiente de su publicación) que compramos gambas para hacer alguna receta y con las que nos sobraron decidimos preparar todo un clásico como el cóctel de gambas. Hoy en día hay quien se permite la osadía de calificarlo como plato pasado de moda o incluso viejuno, como por ejemplo El comidista. A mí nunca ha dejado de gustarme y, en estos tiempos en los que he llegado a aborrecer algunos platos de moda como la cebolla caramelizada o la combinación de queso de cabra con confitura, me parece más necesario que nunca reivindicarlo como clásico. Además es un plato muy sencillo y el único secreto es ser generoso con las gambas y muy comedido con la lechuga. Hay quien añade cosas extrañas como piña o palitos de cangrejo, pero yo prefiero ceñirme al original.


Ingredientes (2 personas):
  • 12 gambas grandes
  • 2 puñados de hojas de lechuga
  • 2-4 cucharadas de salsa cóctel
Preparación:
  • Cocer las gambas en agua hirviendo. Dejarlas enfriar y pelarlas.
  • Lavar la lechuga, escurrirla muy bien y picarla muy finita.
  • Servir una base de lechuga, regar con 1-2 cucharadas de salsa cóctel y completar con las gambas.

miércoles, 25 de marzo de 2015

Tortilla de pan

Hoy me gustaría compartir con vosotros un pequeño truco gastronómico que, sorprendentemente, creo que no es demasiado conocido. Cuando empanamos algún alimento es habitual que nos terminen sobrando huevo batido y pan rallado que normalmente desechamos. Mi abuela me enseñó a hacer una tortillita de pan rallado, mezclándolos junto a una pizca de sal y pasándolos por la sartén en el mismo aceite donde hayamos frito el alimento empanado. La verdad es que está bastante buena teniendo en cuenta que son sobras; cuando comíamos croquetas en casa de la abuela siempre nos peleábamos por la tortilla de pan. Por cierto, según mi abuela, este aperitivo combina muy bien con un poquito de pan y se permite hacer una excepción a la conocida regla de "pan con pan, comida de tontos".


domingo, 22 de marzo de 2015

Minestrone

Como ya sabéis, Superfluo y yo pasamos una temporada en Italia, por lo que somos muy fans de su comida. Sin embargo, la minestrone, su sopa mas famosa, nunca la habíamos hecho y es una pena porque esta buenísima. La minestrone para quien no lo sepa es básicamente una sopa de verduras, que puede llevar también alubias blancas, como es nuestro caso. Es una receta fácil pero laboriosa, sobretodo porque hay que pelar y cortar todas las verduras que lleva y eso hace que se te vaya un rato grande. Por lo demás, no tiene ninguna dificultad. La receta que traemos la encontramos en la pagina de Youtube de GialloZafferano, una cocinera italiana que hace recetas riquísimas.


Ingredientes (6 personas):
  • 1 zanahoria
  • 1 trozo de apio
  • 1/2 puerro
  • 1/2 cebolla
  • 1 diente de ajo
  • 1 calabacín
  • 1 trozo de calabaza
  • 2 puñados de guisantes
  • 3-4 ramilletes de coliflor
  • 1 tomate
  • 150 g de alubias blancas ya cocidas
  • Perejil
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Pimienta
  • Queso parmigiano
Preparación:
  1.  Lo primero que tenemos que hacer es pelar y trocear todas las verduras. Por una parte troceamos muy finamente la zanahoria, el apio, el puerro, la cebolla y el diente de ajo. Reservamos.
  2. Por otra parte pelamos y troceamos el calabacín, la calabaza y el tomate. Separamos las flores de la coliflor en trozos pequeños. Desgranamos los guisantes si no son congelados.
  3. En una cazuela con un buen chorro de aceite de oliva añadimos la primera tanda de verduras (zanahoria, apio, puerro, cebolla y ajo) y sofreímos bien. Cuando ya este doradito añadimos el resto de verduras (calabaza, calabacín, coliflor, guisantes y tomate) y las alubias blancas. Removemos.
  4. Añadimos 2 litros de agua y dejamos cocer durante 30 minutos.
  5. Añadimos la costra del parmigiano para que le dé sabor y dejamos cocer otros 30 minutos. En la receta original añaden también panceta, pero la sopa ya es suficientemente sabrosa sin ella.
  6. Corregimos de sal y de pimienta, añadimos el perejil picado, removemos bien y servimos.
Como veis no tiene ninguna dificultad y con esas cantidades te da para 6 raciones de plato único. Nosotros como somos 2 congelamos lo que sobra y aguanta perfectamente. Servido con unos trozos de pan y un poco queso para espolvorear por encima está buenísima.  Probadla y ya nos contaréis.

domingo, 15 de marzo de 2015

Patés caseros (2)

En Reyes Superfluo me regalo un set de boles para presentar patés (como sabéis me encantan todos los cacharrillos de cocina y para mi todas estas cosas "especiales" de cocina son un regalo estupendo, ya que generalmente me controlo a la hora de llenar la casa de chismes en el día a día) Todavía no los habíamos utilizado, así que el fin de semana pasado preparamos una comida a base de patés vegetales.

Como sabréis la red es un lugar magnífico para encontrar recetas de todo tipo y, buscando buscando, me decidí por estos cuatro patés que encontré en diferentes blogs de cocina: La tentación vive arriba, Gastronomia & cia y Sweetaddict.

En la foto, de arriba a abajo, paté de alcachofas, dip de aguacate con hierbabuena y lima, paté de champiñones al Oporto y paté de tomates secos. Acompañándolo, pan tostado y pan de pita casero (la receta la publicaremos en otra entrada).

Sin más, os dejo con las recetas. Como podéis ver, para que el post no se hiciera eterno, he suprimido la lista de ingredientes, poniéndoles subrayados para que los podáis localizar con más facilidad.


PATÉ DE ALCACHOFAS
  1. Lo primero que tenemos que hacer es limpiar 6 ó 7 alcachofas frescas. Para ello les quitamos las hojas exteriores y mas duras, quedándonos con el corazón tierno. Quitamos la parte de abajo y la mitad superior de la alcachofa y las ponemos a cocer en abundante agua con sal durante unos 45 minutos. Tanto la parte de abajo como la de arriba de la alcachofa quitadlas justo antes de meterlas a cocer para que no se oxiden.
  2. Una vez que estén tiernas las escurrimos (reservando un poco de agua de cocción) y las ponemos en el vaso de la batidora, junto con medio diente de ajo, una cucharada de aceite de oliva, otra cucharada de mahonesa, 20 g de queso parmigiano, 20 g de anacardos, sal, pimienta y un chorrito de zumo de limón. Trituramos todo y corregimos de sal y de textura, añadiendo un poco de agua de la cocción si lo vemos muy espeso. 
  3. Lo dejamos enfriar y servimos.
PATÉ DE AGUACATE CON HIERBABUENA Y LIMA
  1. En el vaso de una batidora ponemos 1 diente de ajo, unas hojas de hierbabuena fresca, dos o tres trozos de cebollino, un ramillete de cilantro fresco, el zumo de una lima, pimienta negra, un poco de sal, 1 cucharada sopera de aceite de oliva y un aguacate pelado y troceado. Trituramos bien todo y servimos. (Para evitar que tome mal color es recomendable hacerlo en el momento de ir a servir, ya que el aguacate se oxida con facilidad).
PATÉ DE CHAMPIÑONES AL OPORTO
  1. Lo primero que vamos a hacer el limpiar 200 g de champiñones. Les retiramos la parte de la raíz y los pasamos por agua, frotándolos para quitarles toda la tierra que puedan tener. Los laminamos y reservamos.
  2. Pelamos y partimos en cuadraditos media cebolla. La rehogamos en una sartén con un poco de aceite de oliva. Una vez rehogada añadimos los champiñones laminados, salpimentamos, agregamos un poco de tomillo y dejamos cocer removiendo de vez en cuando hasta que se haya evaporado el agua que sueltan los champiñones.
  3. Agregamos un diente de ajo picado y un ramillete de cilantro picado. Regamos con 100 ml de Oporto y dejamos cocer a fuego bajo hasta que se haya evaporado casi todo el vino.
  4. Cuando este terminado agregamos 20 g de almendra molida, removemos bien y pasamos al vaso de una batidora. Batimos hasta conseguir una masa homogénea. Si lo vemos muy espeso podemos rectificar con un poco de agua, pero teniendo en cuenta que la textura debe ser de paté, e incluso que con trocitos de champiñón no triturados del todo está muy bueno. Dejamos enfriar y servimos.
PATÉ DE TOMATES SECOS
  1. Unas horas antes de preparar el paté ponemos 14 ó 15 tomates secos a remojo en un bol con agua para que se hidraten.
  2. A la hora de hacer el paté, escurrimos los tomates, los ponemos en el vaso de la batidora, junto con una cucharada de aceite de oliva, un diente de ajo picado, 6 ó 7 almendras y una pizca de sal. Trituramos todo y probamos. Si lo vemos muy espeso se puede añadir un poco más de agua y volver a triturar. También se le puede añadir alguna hierba (tomillo, orégano...) al gusto. Servimos.

domingo, 8 de marzo de 2015

La prensa

Hace un lustro (¡cómo pasa el tiempo!) os contamos nuestra visita a Bal d'Onsera, por aquel entonces el único restaurante de Zaragoza con Estrella Michelín. Poco después, La Prensa recibió la estrella y en la última edición la Bal d'Onsera la perdió, por lo que tenía ganas de probar el ahora considerado como el mejor restaurante de la ciudad y lo escogí para la celebración de mi cumpleaños.

Una de las pegas habituales del restaurante es su ubicación, en el barrio de San José y por tanto lejos del centro de la capital aragonesa. Aparte de eso, mi valoración es bastante buena. Me gustó mucho la comida, la presentación, la cantidad, el servicio y el precio un poco menos, pero ya se sabe que la calidad hay que pagarla y que es un lugar para ocasiones especiales (de todos modos, fue más barato que la Bal d'Onsera en 2009).

Tanto Noe como yo pedimos el menú degustación, que va cambiando y que en esta ocasión estaba compuesto por los siguientes platos:

  • Aperitivos: foie con mango, "perrito caliente" y croqueta de queso azul y nueces
  • Sashimi de salmón con tierra de especias, albahaca, soja dulce y caviar de wasabi
  • Bogavante con patata confitada y ali-oli ligero
  • Risotto de setas y trufa de Sarrión con parmesano
  • Rodaballo con salsa de ajo tostado, algas, huevas de trucha
  • Cordero Agnei con sus brasas, patata y albaricoque
  • "Yogur": bizcocho de chocolate, con helado de yogur, frutos rojos y sopa caliente de chocolate blanco y maracuyá
  • Panes variados de cereales, aceitunas y nueces
  • Café y petits fours (fuera de menú)
El precio del menú es de 55 euros sin bebidas ni café. Incluyendo para cada comensal una copa de vino, una botella de agua (1 litro) y un café, el importe asciende a 68 euros por persona (IVA incluido). Os detallo cada una de los platos con una fotografía (pido disculpas por adelantado, ya que el móvil hizo algunas borrosas).

El menú empieza con tres aperitivos a la vez. El primero de ellos es foie con mango (y algún ingrediente más) servido sobre una piedra ¿de sal? Muy original la presentación y estaba realmente bueno aunque se acaba demasiado pronto.


Os retaría a adivinar el segundo aperitivo a partir de la foto si no hubiera enumerado antes los platos del menú. Se trata de una copa con aspecto de postre y sabor a perrito caliente: la nata tiene el sabor de la salchicha, y se acompaña de ketchup en la superficie y helado de mostaza en el fondo. Muy sorprendente y divertido.


Para concluir los aperitivos, una croqueta de queso azul y nueces. Muy equilibrado el sabor del queso y muy notable el sabor de la nuez. El rebozado era más "gordo" de la normal, utilizando panko y no pan rallado. La temperatura era buena (se podía comer sin abrasarse la lengua) y la presentación curiosa. No es la mejor de mi vida pero supera la prueba de fuego de los maestros croqueteros.


La primera parte de la comida la acompañé de una copa de vino blanco. El sumiller me ofreció un vino alemán de la zona de Reinhesse, me enseñó la botella azul pero no recuerdo el nombre (buscando en Internet, creo que era un Blue Nun con uva Rivaner). Muy aromático, muy bueno en boca y combinó muy bien con los platos.


Durante toda la comida vinieron a servirnos trocitos de pan de tres variedades: aceitunas, nuez y cereales. Especialmente buenos los dos primeros, todos ellos acompañaron bien la comida.


A continuación, sashimi de salmón. Había que trocearlo, mojarlo en soja, rebozarlo en la tierra de especias y acompañarlo de la albahaca y el caviar de wasabi. Realmente bueno. El caviar de wasabi me pareció muy original y tenía el punto justo de picante. La crema de albahaca también me llamó la atención. Un lujazo de plato.


Seguidamente, uno de mis platos favoritos de la jornada: bogavante con patata confitada, alioli ligero, calabacín, remolacha y el jugo del bogavante. Bonita composición y excelente sinfonía de sabores en boca. Me llamaron la atención el sabor del bogavante, el irreconocible sabor del calabacín tan finamente cortado y la suavidad del alioli y la crema de remolacha.


Seguimos con un risotto de hongos con trufa y una costra de parmesano. Aunque hoy en día es casi un plato clásico, la presentación era muy buena, en un curioso recipiente, y estaba muy bien ejecutado: el arroz estaba bien cremoso y el sabor era realmente bueno.


Después llego el turno del plato fuerte de pescado, rodaballo en salsa de ajo tostado con huevas de trucha y alga, que siendo un buen plato quizá fue el que menos me gustó. Las pinceladas de algas me parecieron insuficientes y no soy muy fan del ajo, pero hay que reconocer el excelente punto del pescado y la calidad de la materia prima.


Para acompañar el plato de carne, pedí una copa de vino tinto y el sumiller me ofreció un Lagar d'Amprius de uva garnacha procedente de la comarca aragonesa del Matarraña, famosa por muchas cosas pero no por sus vinos. Me avisó de que tenía un postgusto a aceite de oliva del cercano Bajo Aragón y para mí sorpresa fue realmente así. Un vino verdaderamente magnífico.


El plato de carne fue Agnei (una variedad de cordero aragonesa) con sus brasas, patata y albaricoque. A estas alturas del almuerzo, la presentación con tierra y flores nos pareció un poco repetitiva, pero la carne estaba perfectamente cocinada y tenía un sabor delicioso: me encantó mi primera experiencia con el agnei.


El postre consistía en un bizcocho de chocolate con frutos rojos, helado de yogur y una sopa de chocolate blanco y maracuyá. Con lo prolijos que son en este tipo de restaurantes con la descripción de los platos, sorprende que el nombre oficial fuera simplemente "yogur" (con las comillas). Ya había visto antes postres parecidos y conocía ese concepto de servir la sopa en mesa, pero me sigue sorprendiendo merced a ese adorno superior que recuerda a la obra de Antoni Tapies y que en realidad era caramelo. Además, estaba todo muy bueno: a destacar el sabor a fruta de la pasión de la sopa.


Tienen una amplia carta de cafés e infusiones. Nos decidimos por un café de Kenia y otro de Etiopía (Kaffa Limú). Yo elegí el keniata para intentar compensar la decepción que sufrí en Nairobi pero, aunque estaba bueno, no superó a cualquier expreso "normal" bien preparado.


Como es habitual en los restaurantes de este nivel, es acostumbre invitar a unos petits fours para acompañar el café. De izquierda a derecha y de arriba a abajo, chocolate, coquito, café con leche y almendrado. A esas alturas tampoco había mucha hambre, pero se agradece el detalle.


En resumen, mis platos favoritos fueron el salmón, el bogavante y el cordero. Me pareció un poco mejor de lo que recuerdo la Bal d'Onsera (no sé si ha perdido nivel y por ello su estrella), Noe opina lo contrario. En cualquier caso, la Estrella Michelín es más que justa y es un templo imprescindible en la gastronomía zaragozana.

La Prensa. Calle José Nebra 3, Zaragoza. Web: http://www.restaurantelaprensa.com







domingo, 1 de marzo de 2015

Tajin de dátiles y escalonias

¡Hola a todos! Aquí vengo con la... iba a decir segunda receta de febrero, pero me acabo de dar cuenta de que ya estamos en marzo, ¡madre mía! Bueno, pues con la primera receta de marzo, que llevaba en borradores más de un mes.

Como ya sabéis, tanto a superfluo como a mi nos encanta probar recetas nuevas y sabores de otras cocinas, por eso hace tiempo me compré un libro de "Cocina  marroquí, tajines y cuscús". Tengo que decir que es un libro estupendo, de tapa dura, formato medio y con un montón de recetas, sobre todo tajines de todo tipo, de cordero, de ternera, de pollo o pato, de pescado...

Para  completar el libro, en mi cumpleaños superfluo me regalo este tajin que veis en la foto, que encontramos en la tienda Casa por un precio muy asequible, y no como esos de El corte inglés por los que te piden una pasta. Además, a la hora de comprar un tajin es importante tener en cuenta que sea uno que se pueda meter en el horno y usar en vitrocerámica. El de Ikea parece que con el horno no hace buenas migas. Este mío como es totalmente de barro se puede usar en horno sin problema.

Y después de esta charla os voy a dejar con una de las recetas que hemos hecho con él. No es la primera que probamos, sin embargo si que es la que tiene una mejor presentación en la fotografía. Ya os enseñaré otras recetas, porque todas están buenísimas. Eso sí, para un sábado o domingo, porque la cocción es larga.


Ingredientes (2 personas):
  • 400 g de carne de cordero 
  • 8 escalonias (o, en su defecto, cebollitas francesas)
  • 125 g de dátiles deshuesados
  • 2 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de cúrcuma molida
  • 1 rama de canela
  • 2 cucharaditas de miel
  • Semillas de sésamo
  • Aceite de oliva
  • 1 nuez de mantequilla
  • Sal
  • Pimienta
Preparación:
  1. Calentamos en un tajin 2 cucharadas de aceite de oliva y una nuez de mantequilla.
  2. Doramos la carne de cordero por todos los lados. Reservamos.
  3. En el mismo tajin saltear las cebollitas francesas peladas y enteras y los dientes de ajo hasta que estén dorados, removiendo de vez en cuando.
  4. Agregar la cúrcuma, la canela y la carne de nuevo. Remover bien.
  5. Añadir 300 ml de agua más o menos y llevar a ebullición. Bajar el fuego, poner la tapa y dejar cocer durante 1 hora, removiendo de vez en cuando.
  6. Al cabo de una hora, añadimos la miel y removemos bien. Salpimentamos, agregamos los datiles y cocemos tapado durante 30 minutos más.
  7. Servir con semillas de sesamo por encima, y acompañalo de pan de pita o de cuscús.
Pues eso es todo, como veis es una receta larga, pero muy sencilla, asi que si os animáis ya me contaréis qué os parece. ¡Hasta la próxima!

domingo, 22 de febrero de 2015

Molletes de Antequera

¡Hola a tod@s! Vaya mes que llevamos, ni una sola receta publicada, a pesar de que tenemos varias en borradores (y otras que hemos cocinado pero no nos parecían suficiente interesantes para ponerlas en el blog). Durante estas ultimas semanas una de las cosas a las que me he dedicado es a hacer pan. La especialidad más repetida han sido estos molletes antequeranos, un pan perfecto para desayunar con tomate rallado, sal y aceite de oliva. Junto con un zumo y un café el mejor desayuno para empezar el día llenos de energía.


La primera vez que los hice fue buscando un buen pan para el desayuno. Un pan que pudiera hacer los domingos y congelar en porciones para sacarlas justo en el momento o la noche antes. Y es que la opción de antes de congelar en trozos el pan que comprábamos en el supermercado ya no nos servía. No sé si es que varían las recetas para ajustar los costes, pero de un tiempo a esta parte el pan se quedaba duro incluso aunque lo dejaras descongelar a temperatura ambiente y se descascarillaba, quedando la miga por una parte y la corteza por otra. ¡¡Un desastre absoluto!!

Esta receta la encontré en el blog "La cocina de los elfos", y da el resultado esperado. Además, aunque es cierto que el proceso es largo, como los tiempos de levado son la mayoría, el trabajo no es mucho y es bastante fácil. Os dejo la receta por si queréis iniciaros en el mundo del pan.

Ingredientes:

Para el prefermento:
  • 100 g de harina (yo mezclo 50g de harina normal y 50g de harina de fuerza, ambas compradas en Carrefour de marca blanca)
  • 150 ml de agua
  • 1 g de levadura prensada de panadería.
Para el resto de la masa:
  • Todo el prefermento
  • 300 g de harina normal
  • 100 g de harina de fuerza
  • 150 ml de agua
  • 20 ml de aceite de oliva virgen extra
  • 10 g de sal
  • 3 g de levadura prensada de panadería
Preparación:
  1. Lo primero que tenemos que hacer es el prefermento (para el que no lo sepa el prefermento es como una masa madre rápida). Para hacerlo en un vaso disolvemos la levadura en el agua y añadimos a la harina. Removemos bien con unas varillas. Este es un prefermento líquido, así que quedara como una papilla. Tapamos el bol con papel film bien tenso y lo dejamos reposar 3 horas. Otra opción es dejarlo reposar la mitad de tiempo y después meterlo en el frigorífico durante toda la noche, dependiendo de cuando queramos hacer nuestros molletes, pero eso sí, antes de hacer la masa lo tendremos que sacar del frigorifico y dejarlo un rato a temperatura ambiente.
  2. Una vez que el prefermento esta listo preparamos la masa. Este paso yo lo hago con kitchenAid, pero se puede hacer perfectamente a mano. Para ello en el bol de la amasadora ponemos las harinas, el prefermento, el aceite y la sal. Amasamos un poco y después añadimos el agua con la levadura, que habremos disuelto previemente, y seguimos amasando hasta tener una masa homogénea y lisa.
  3. Cuando tengamos un masa lisa lo dejamos reposar en un bol tapado con papel film  durante aproximadamente 1 hora. Se supone que es hasta que doble el volumen, pero lo que no haya subido en este primer paso ya lo hará en el segundo. Yo realmente prefiero que el segundo levado sea mas largo para que la miga sea mas "vaporosa".
  4. Sacamos la masa del bol y la dividimos en 8 porciones de 100 g o 10 porciones de 80 g, dependiendo de como de grandes queráis los molletes. (Los de la foto son de 100 g, pero tener en cuenta que después del horneado pierden algo de peso). Les damos forma de bola y dejamos reposar 10 minutos.
  5. Con ayuda de un rodillo o con las manos los aplastamos un poco, hasta que tengan 1cm de grosor mas o menos. Los ponemos en la bandeja del horno en la que previamente habremos puesto papel de horno y los tapamos con un trapo limpio. Dejamos subir durante otra hora o un poco mas, puede llegar a 2 horas si en la casa no hace mucho calor. Otra vez se supone que deben doblar el volumen.
  6. Cuando hayan levado encendemos el horno a 180ºC y cuando llegue a la temperatura horneamos durante 15-20 minutos dependiendo de lo dorados que gusten, pero tener en cuenta que no es un pan que deba estar muy cocido, sino más bien blanquito.
  7. Dejamos enfriar y ya podemos saborearlos. Lo dicho, con tomate, sal y aceite están buenísimos, y si a eso le añadimos un poco de embutido y nos hacemos un bocadillo ¡¡ya son la muerte!!

sábado, 10 de enero de 2015

Sopa de col blanca y calabaza

Hola a todos de nuevo!! Como ya os he contado en alguna otra ocasión, soy asidua lectora de un montón de blogs de cocina, de los que guardo las recetas que me gustan para más adelante. Hace meses guarde esta receta, a pesar de que pensaba que nunca la llevaría a cabo porque a superfluo las coles no le gustan demasiado.

Sin embargo, hace un mes decidimos preparar gyozas, uno de cuyos ingredientes es la col blanca, así que nos sobraba más de media y tenía que hacer algo con ella. Entonces es cuando me acordé de esta sopa, del blog "Lola en la cocina"

Ella utilizaba solamente col y tomate en su preparación. Yo agregue también media calabaza que tenia en el frigorífico sin dueño. Y el resultado fue muy bueno, tanto que en cuanto pueda, y antes de que termine el invierno tendré que repetir. Y es que últimamente me estoy haciendo fan de las sopas calenticas!!

Sin más os dejo la receta para que podáis aprovechar a hacerla y reconfortaros de estas temperaturas tan invernales que tenemos.

Ingredientes (unas 10 raciones):

  • 1/2 col blanca
  • 1/2 calabaza
  • 2 cucharadas de tomate concentrado (o cualquier concentrado de verduras que nos guste, preferiblemente que sea natural)
  • 1 cebolla
  • 2 tomates
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Agua
Preparación:
  1. Lo primero que vamos a hacer es cortar la cebolla y la col en juliana y sofreírlas en una cazuela grande con un poco de aceite de oliva durante 10 minutos.
  2. Pelamos la calabaza y la cortamos en cuadraditos no muy grandes. Añadimos a la cazuela y removemos.
  3. Añadir el tomate concentrado. Remover y añadir agua hasta cubrir las verduras. Dejar cocer durante 30 minutos.
  4. Pelar los tomates, eliminar las semillas del interior y cortar en daditos. Añadir a la sopa y dejar cocer 15 minutos más.
  5. Rectificar de sal y retirar del fuego.
  6. A la hora de servir yo añado un chorrito de zumo de limón que le da un toque muy bueno.
P. D. Al salir tantas raciones las puse en tuppers y las congelé para tener sopita para unas cuantas semanas y puedo certificar que aguanta la congelación y descongelación perfectamente.

miércoles, 7 de enero de 2015

Bombones del músico

¡¡Feliz año 2015 a todos!! Aquí estamos de nuevo tras las navidades, con propósitos nuevos, entre los cuales esta por supuesto innovar en la cocina y aprender a hacer nuevas recetas.

Empezamos con estas galletas, bombones... no sé ni cómo llamarlas exactamente ¿Habéis visto qué bonitas son? Es uno de los regalos que hicimos estas navidades a nuestras madres, en una cestita con productos artesanos de Aragón (de proximidad, como diría superfluo) y productos caseros hechos por nosotros mismos. La verdad es que no tienen ningún misterio, son facilísimas de hacer y te hacen quedar como un experto en la cocina. Os dejo la receta para que vosotros también podáis hacerlas y disfrutarlas.


Ingredientes:
  • Una tableta de chocolate de cobertura de 250 g
  • Frutos secos variados (nueces, pipas de calabaza, uvas pasas, arándanos secos, almendras...)
Preparación:
  1. Trocear el chocolate en un bol de cristal y deshacerlo en el microondas con cuidado de que no se queme. Ponerlo primero un minuto y después sacarlo y remover, ponerlo en intervalos de 30 segundos hasta que este líquido.
  2. En una bandeja, poner un trozo de papel para horno. Con ayuda de una cucharilla ir poniendo porciones de chocolate procurando que queden redondas.
  3. Poner unos frutos secos variados por encima.
  4. Meter al frigorífico y dejar enfriar durante unas horas.
ATENCIÓN: Si vais a ponerlas en una caja o bolsita para regalar hay que tener cuidado al hacer el "trasvase", procurando no manipularlas demasiado, porque con el simple calor de los dedos se deshacen a una velocidad rapidísima.