Ingredientes (2 personas):
- 170 g de pasta corta
- 125 g de salchicha fresca
- 100 ml de nata
- Unas hebras de azafrán
- Queso parmesano
- Pimienta negra
- Sal
- Cocer la pasta al dente en abundante agua salada, un par de minutos menos de lo que indique el paquete.
- Mientras tanto, pelar las salchichas, partirlas en trozos pequeños y saltearlas en una sartén. No es necesario añadir aceite puesto que las salchichas soltarán grasa por sí mismas.
- Cuando estén doraditos los trozos, añadir la nata y dejar cocinar a fuego muy lento para que la nata nunca lleve a hervir.
- Disolver las hebras de azafrán en un poco del agua de cocción de la pasta y añadirla a la sartén. Salpimentar al gusto
- Escurrir la pasta (reservando el agua de cocción), añadirla a la sartén y remover bien para distribuir bien la salsa.
- A continuación se añaden a la sartén el queso rallado y un poco de agua de cocción de la pasta y se deja cocinar a fuego a lento un par de minutos hasta que se funda el queso y se evapore el agua. Esto se hace para que la salsa quede con textura de risotto, pero también podría omitirse este paso y servirse directamente con el queso rallado por encima como hice yo (en este caso, hay que cocer la pasta un par de minutos más).




