Pollo con mango y pimientos

Un día que me apetecía probar algún plato de comida tailandesa, estuve buscando ideas por Internet. Aunque no encontré nada que me convenciera del todo, descubrí una variación de la receta de hoy, con alguna inspiración oriental, aunque yo no lo calificaría de comida tailandesa. Es un plato picante de pollo salteado con mango y pimientos, sencillo pero muy resultón.



Ingredientes (2 personas):

• 4 pechugas de pollo fileteadas
• 1/2 pimiento rojo
• 1/2 pimiento verde
• 1/2 mango
• 1/2 cebolla
• 1/2 tacita de zumo de limón
• 1/2 taza de salsa de soja
• 1 diente de ajo
• 1 guindilla
• Aceite de oliva

Preparación:

• Lavar los pimientos, escurrirlos con papel de cocina y partirlos en juliana.
• Pelar el mango y la cebolla y partirlos en juliana.
• Partir el pollo en trozos pequeños, del tamaño de un bocado, y colocarlo en un pequeño bol. Se puede salpimentar al gusto, aunque no es necesario porque ya saldrá suficientemente sabroso.
• Reservar la cuarta/quinta parte del zumo de limón y la salsa de soja. Cubrir el pollo con el resto y añadir un diente de ajo, una vez picado. Dejar macerar durante 1-2 minutos y escurrir.
• Pochar la cebolla en una sartén con un poco de aceite de oliva.
• Cuando esté pochada, añadir los pimientos.
• Una vez que se pongan algo blandos (pero no del todo), añadir el pollo y la guindilla.
• Cuando el pollo esté bien pollo dorado, añadir el mango, el limón y la soja restantes, y saltear ligeramente a fuego alto hasta que se evaporen los líquidos.

Delicioso para los amantes del picante.

Ensalada de requesón y frambuesas

Entrada programada: estamos en Belgica

Otra de las ensaladas que encontramos en el libro "200 recetas para ensaladas" fue esta ensalada de requesón y frambuesas. Es estupenda como acompañamiento ligero de una carne o incluso de un pescado, pero en mi opinión pega mas con la primera.

Ingredientes: (para 2 personas)

• Lechugas variadas
• 8 tostadas de pan baguette
• Requesón para untar
• Frambuesas
• Media granada
• Aceite de oliva virgen extra
• Vinagre de Módena
• Sal

Preparación:

1. Poner las lechugas variadas sobre los platos
2. Untar las tostadas con requesón.
3. Desgranar la granada y espolvorear los granos sobre las tostadas de requesón. Colocarlas sobre las lechugas.
4. Colocar las frambuesas sobre la ensalada.
5. Aliñar con sal, aceite de oliva y vinagre de Módena.

Mas fácil imposible verdad?? Y el resultado es buenísimo, y muy fresco!!

Cardo con pasas y piñones

Entrada programada. Estamos en Holanda

Desde hace bastante tiempo tenia en casa un bote de cardo en conserva. Como generalmente como yo sola, me daba bastante pereza hacerlo porque tendría que comer lo mismo dos días seguidos, y eso es algo que no me hace mucha gracia.

El sábado superfluo decidió que aceptaba comerlo (estaba empeñado en que no le gustaba, a pesar de que después comprobó que eso no era cierto), así que saqué el cardo, las pasas y los piñones que tenia reservados y a cocinar.

Ingredientes: (para 2 personas)

• Un bote de cardo en conserva
• Un puñado de piñones
• Un puñado de uvas pasas sin pepitas
• 1/2 cebolla
• 1/2 cucharada de harina
• aceite de oliva virgen extra
  
• sal
  

Preparación:

1. Picar la media cebolla muy finamente y sofreirla en una sartén con un chorrito de aceite y añadir un poco de sal.
2. Una vez que la cebolla este pochada, añadir la media cucharada de harina. Remover para que se sofría y no sepa a harina.
3. Agregar las pasas y los piñones. Remover bien
4. Escurrir el cardo, y una vez escurrido agregarlo a la sartén. Remover.
5. Añadir agua hasta cubrir el cardo y dejar cocer hasta que el agua se haya casi evaporado. Ir removiendo de vez en cuando para que no se pegue.

El resultado fue estupendo, y además, una receta supersana, con las ventajas de las verduras y las ventajas de los frutos secos. Genial para un primer plato o incluso para una cena ligera.

Ensalada de cereales , pollo y piña

Hace unos días fui a la librería y entre los libros de cocina encontré uno titulado "200 recetas bajas en grasas". Ojeando las recetas me gustó, así que como solamente valía 5 euros lo compré. Una de las recetas que venían era esta ensalada. Con ligeras modificaciones decidimos hacerla: cambiamos el arroz por cinco cereales, los arándanos por aceitunas negras y el pimiento rojo por tomate, además de añadir miel a la vinagreta.

A pesar de no parecerse mucho a la original estaba muy buena y merece la pena. El frescor que da la piña es genial, sobretodo si sale tan dulce como la que compramos nosotros ese día, así que es una receta estupenda para estos días de calor.

Ingredientes:

• 120 g de mix 5 cereales (trigo, escanda, cebada, arroz y avena)
  
• 10 tomates cherry
• 2 rodajas de piña natural
  
• 2 pechugas de pollo
• 10 aceitunas negras
• 3 sobres de mostaza
• aceite
• vinagre
• sal
• miel

Preparación:

1. Cocemos los cereales siguiendo las indicaciones del paquete.
2. Cortamos los tomates cherry por la mitad, y las rodajas de piña natural en trocitos. Cortamos las aceitunas por la mitad.
3. En una sartén con un poco de aceite hacemos las pechugas de pollo. Una vez hechas, las cortamos en trocitos.
4. Mezclamos todos los ingredientes anteriores: los cinco cereales, los tomates, la piña, las aceitunas y el pollo.
5. Hacemos una vinagreta con la mostaza, un chorrito de aceite, un chorrito de vinagre, sal y un poco de miel. Removemos bien hasta que quede una salsa homogénea.
6. Añadimos la salsa a la ensalada y removemos para que se mezclen bien los sabores.
   

Gnocchi alla sorrentina

La sorrentina es una salsa típica de Sorrento (en la región italiana de Campania) a base de tomate y mozzarella que se utiliza para condimentar platos de pasta, especialmente gnocchi (bolitas de patata). Es tan deliciosa o más como parece. Como todas las salsas tradicionales, admite múltiples variantes; os contamos nuestra versión e intercalamos algunas variantes.

Ingredientes (2 personas):

• 400 g de gnocchi
• 1 lata de tomates pelados y despedazados
• 125 g de mozzarella de búfala
• 1/2 cebolla
• 4-6 hojas de albahaca (y algunas más para decorar)
• Queso parmesano
• Aceite de oliva virgen extra
• Sal
• Pimienta

Preparación:

• En primer lugar, preparamos una salsa de tomate clásica, pero añadiendo mozzarella. Algunas variantes de la receta prescinden de la mozzarella en este punto, pero nosotros recomendamos utilizarla porque da mucho más sabor al plato. Por tanto, pelar y cortar la cebolla, pocharla con un poco de aceite en una sartén, añadir la albahaca, el tomate y la mitad de la mozzarella cortada en daditos, salpimentar al gusto, y dejar cocinar a fuego lento hasta que la salsa espese, removiendo de vez en cuando con una cuchara de madera.
• Una vez hecha la salsa, retirar las hojas de albahaca cocidas.
• Cocer los gnocchi en agua salada, siguiendo las instrucciones del paquete y escurrir.
• Mezclar los gnocchi con 2/3 de la salsa de tomate, removiendo bien para que se distribuya homogéneamente la salsa. Colocarlos en un recipiente para el horno y cubrirlo con el resto de la salsa de tomate, el resto de la mozzarella cortada en trozos pequeños, y con abundante queso parmesano rallado.
• Cocinar en el horno a 200 º C durante unos 15 minutos, hasta que se funda la mozzarella y se dore el queso. Otras variantes prescinden del horneado, utilizando únicamente la salsa de tomate.
• Decorar con algunas hojas de albahaca fresca.

Habas con jamón

Las habas de jamón son un estupendo plato tradicional granadino. Es difícil llegar al nivel con que las preparaba mi abuela, pero aún así me apetecía prepararlas en casa aprovechando que es temporada, aunque no encontramos habas frescas y usamos congeladas. Para dar un toque moderno, intenté aromatizarlas con menta, tal y como las he probado en alguna ocasión. Sin embargo, tengo que decir que no conseguí apreciar demasiado el sabor.

Ingredientes (2 personas):

• 400 g de habas
• 100 g de taquitos de jamón
• 2 huevos
• Unas hojitas de menta
• 1/2 vaso de vino blanco
• 1/2 cebolla
• Aceite de oliva

Preparación:

• Pelar, cortar y pochar la cebolla en una cacerola con un poco de aceite de oliva. Cuando esté blanda, añadir el vino y dejar  evaporar.
• Añadir la menta, las habas peladas, un poco de agua hasta cubrirlas y dejar cocinar a fuego lento hasta que se pongan tiernas. El tiempo depende de las habas; nosotros utilizamos habas congeladas y las tuvimos casa una hora. De vez en cuando, hay que levantar la tapa y remover para que no se peguen al fondo.
• Un par de minutos antes de terminar la cocción, añadir el jamón y mezclar bien.
• Una vez tiernas, sacar las habas y servirlas en la fuente o en platos individuales.
• Freír los huevos en una sartén con aceite de oliva y colocarlos por encima de las habas.

La Miguería

Uno de los platos que más me gustan son las migas, un plato típico de pastores con el que se aprovechan las sobras de pan duro. Las migas son típicas de muchas partes de España, especialmente en Castilla la Mancha, Murcia, Extremadura, Andalucia y Aragon, siendo su base la misma y cambiando principalmente los ingredientes de acompañamiento. En Aragón suelen acompañarse con uvas, huevo frito o longaniza.

Hace unas semanas encontramos en el Tubo (la zona de tapas de Zaragoza) un bar llamado La Miguería, y como aquel dia ya habiamos cenado, decidimos que teniamos que probarlo otro día. Y este domingo fue el día.

La Miguería es un bar-restaurante muy acogedor. Tiene unas cuantas mesas para sentarte a hacer una comida o una cena mas tranquilamente, y también una barra grande donde poder tomarte unas migas como tapita, costumbre muy zaragozana. En la carta tienen un montón de platos, desde ensaladas hasta tostadas, pasando por raciones y por supuesto migas, muchos tipos de migas.

Nosotros ayer decidimos pedir unas migas especiales (migas con chorizo, longaniza, morcilla, setas, uvas y huevo frito). Estaban buenisimas. Y lo mejor el precio, el plato de migas (estupendo para dos) y dos bebidas por 12€. Sin duda, un lugar muy recomentable para ir, y por supuesto al que nosotros volveremos, tanto por la calidad como por el precio.

La Miguería. C. Estébanes 4, Zaragoza.


Ver mapa más grande

Bizcocho de té matcha

Hoy venimos con una receta un poco especial, elaborada con té verde matcha.

El té verde matcha es un té molido que tiene su origen en China, en tiempos de la dinastía Song (960-1279). Con la aparición del budismo en Japón, en el año 1191, el monje Eisai, llevo el té molido a Japón. Con el tiempo el te molido fue desapareciendo en China y adquiriendo mayor importancia en Japón, gracias a las costumbre de los monasterios budistas. Mas tarde, entre los siglos XIV y XVI las clases altas de la sociedad japonesa adoptaron este té.

Con él, además de la típica infusión, que según dicen da mas energía que el café, se pueden preparar infinidad de postres, entre ellos este bizcocho de té matcha, que encontramos en al página de Comer Japonés.

Ingredientes (4 personas):

• 3 huevos enteros
• 2 yemas de huevo
• 85 g azúcar
• 25 g harina
• 7 g maicena
• 13 g de té verde en polvo matcha
• 15 ml leche

Para el merengue:

• 2 claras de huevo
• 30 g azúcar

Preparación:

1. En un bol batimos los 3 huevos enteros junto con las 2 yemas y los 85 g de azúcar. Removemos bien hasta que quede una masa homogénea.
2. Por otro lado y ayudándonos de la batidora de varillas, montamos las claras de huevos a punto de nieve y añadimos los 30g de azúcar.
   
3. En un tercer recipiente mezclamos la harina, la maicena y el te matcha. Con ayuda de un colador fino lo tamizamos.
4. Juntamos la mezcla del paso 1 con la del paso 2, removiendo bien con movimientos envolventes (sin batir) para que no se pierda la textura de punto de nieve.
5. Añadimos los ingredientes secos a la mezcla y removemos bien hasta que quede una masa homogénea.
6. Añadimos la leche y removemos.
7. Engrasar un molde rectangular con mantequilla y harina o forrarlo con papel antiadherente. Hornear a 200ºC durante unos 45 minutos.
8. Comprobar si el bizcocho esta cuajado con ayuda de un palo de brocheta (si sale limpio esta cuajado)

Realmente delicioso, y muy, muy esponjoso. El único problema de este bizcocho es que hay que comerle recién hecho, pues de un día para otro la esponjosidad baja y queda un poco epachurrado y sin buena presencia. Espero que os guste.

Edición de superfluo: Existen muchos tipos de té matcha. Esta vez lo hicimos con el Premium, de máxima calidad (y precio). En el caso del bizcocho, no podemos comparar, pero en el caso de las trufas recubiertas de té, se nota la diferencia entre un tipo de té u otro.